Paco desde que fue un pequeñajo decía que iba a ser astronauta. Pero por mucho que estudió y trabajó, y por muchas pruebas a las que se presentó, nunca fue elegido. Y así cumplió la edad máxima para presentarse a las pruebas de selección sin haber llegado a cumplir su sueño.
Las fotos de aquel astronauta con garrota y pocos dientes dieron la vuelta al mundo, convertido en el mejor ejemplo de que el saber y la preparación nunca sobran, y de que el esfuerzo y la tenacidad siempre tienen recompensa, aunque no sea como pensábamos en un principio.
Idea y enseñanza principal | Ambientación | Personajes |
Aunque nuestros planes no se cumplan como pensamos, el estar preparados y ser constantes terminará haciendo surgir otras cosas iguales o mejores | Un cohete espacial | Un viejecito |
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